Ya inició la carrera por los cargos públicos para las proximas elecciones.

A pesar de que no hay autorización legal o formal para las campañas procelitistas con miras a las próximas elecciones, varios son los probables candidatos y actuales funcionarios públicos que ya iniciaron solapadamente sus actividades tendientes a buscar posicionar su imágen en la mente de los electores.

Ya están saturandose los rotulos de las mejores posiciones visuales con fotografías o nombres de los futuros candidatos, ya se escucha en las radioemisoras y se vé en la televisión y prensa sendos mensajes que no son mas que propaganda política anticipada.
Y el tribunal supremo electoral que es la entidad reguladora de estas actividades, que antes era una respetable dependencia pública que se había ganado la aceptación de los guatemaltecos, ahora no es capaz de detener esta anticipada muestra de voracidad de las personas que quieren llegar o mantenerse en los cargos públicos para vivir o seguir viviendo de los recursos que los guatemaltecos pagamos en concepto de impuestos, tasas, arbitrios y demás cargas tributarias antojadizas y por demás empobrecedoras de los chapines.
Muchos nos preguntamos, porque si adminstrar un municipio, un departamento, o el país en general es complicado, entonces porque tanta avaricia y tanto esfuerzo desmedido por llegar a ocupar esos cargos?, y la respuesta es muy sencilla; los cargos públicos por elección popular son fuentes de riqueza ilícita, dinero fácil de llevar a los bolsillos, es un enriquecimiento rápido con el dinero de los contribuyentes. Y si a eso agregamos que las leyes vigentes son tímidos reglamentos adminstrativas fácilmente burlados con el retorcimiento de las disposiciones judiciales, el resultado es que esos puestos son pasteles codiciados por los delincuentes de cuello blanco que se disfrazan de adalides o de héroes ante la población que inocentemente los eligen con la esperanza de que sus condiciones de vida puedan mejorar.
Es necesario que los electores tomemos conciencia de nuestra responsabilidad al momento de elegir, debemos informarnos adecuadamente sobre los perfiles de las personas que se postulan y hacerles compromisos por escrito e ineludibles para el cumplimiento de sus propuestas o programas de trabajo a partir del momento de asumir los cargos.